A New Chapter: Capítulo 4 Cheating

Días antes

En Londres, Ian estaba en una cafetería esperando a alguien. Parecía ansioso porque esa persona se estaba demorando. De repente, la puerta del lugar se abre y una mujer entra, que al instante va a la mesa de Ian y lo abraza.

Amanda- Que cara tienes. ¿Estás bien?

Ian- No lo sé.- Se sientan.

Amanda- No me digas que…- Ian la mira.

Ian- No. Nunca.

Amanda- Vamos, ya has engañado antes…

Ian- No soy yo. Es Hannah. Creo que me está engañando.- Amanda se queda impactada al escucharlo.

Amanda- ¿Estás seguro?

Ian- Lo presiento. Sé que me está mintiendo porque cuando la llamo me evade.

Amanda- Tal vez está cansada o muy ocupada.- Ian la mira.- Ian, tal vez…- Le agarra la mano.

Ian- Con que así se siente.- Las lágrimas le empiezan a caer y su voz se empieza a cortar.- Entiendo.

Amanda- Ian…

Días después

En el hemisferio sur, Lucrecia estaba en la casa/campamento de Thomas, aunque nadie la hubiese invitado, rodeada de un ambiente hostil.

Emma- Toma.- Le sirve un café.

Lucrecia- Gracias.

Emma- ¿Por qué estás aquí?

Lucrecia- ¿No puedo esperar a mi novio?

Emma- ¿Qué?- De repente baja las escaleras Sid acompañado de Thomas. Si el ambiente ya era hostil ahora era huracanado.

Lucrecia- ¡Hola amor!- Se lanza a los brazos de Sid y lo besa. Sophie y William estaban sorprendidos pero no hablaban… por si acaso.

Sid- ¿Qué haces acá?- Le dice a la muchacha.

David- ¿Qué haces vos con ella?

Sid- Te lo iba a decir pero…- David se saca una zapatilla y se lo revolea a Sid.

David- ¡Pensé que eras mi amigo traidor!

Lucrecia- ¡David controlate!

Emma- ¡Controlate las pelotas!

Todos se empiezan a pelear contra todos, revoleándose cualquier cosa contundente que estaba a su alrededor. De repente llega Ian y mira la cuasi infantil situación: David ahorcando a Sid mientras Thomas y Emma estaban gritando como locos y Lucrecia intentaba separarlos. Sophie arriba de la mesa bailando y jugando. William intentando alejar a Emma de Lucrecia para que no la mate.

Ian deja en el piso su bolso de viaje y hace un sonoro silbido que detiene toda la situación.

Ian- ¿Qué mierda les pasan?- Todos empiezan a hablar al mismo tiempo.- Ok. Dejen de hablar todos juntos. Sophie, bajate de la mesa. Emma y William se separan de una vez. David.- Lo mira y David deja de estrangular a Sid.- Thomas, esto no es una pelea de gallos, compórtate como un adulto. Usted señorita no sé quién es pero le pido que se retire.

Lucrecia- Seguro. Chau amor.- Besa a Sid.- Nos vemos luego.- La chica se levanta y se va.

David- Creo que lo creyó.- Dice mientras se levanta él también.

Sid- ¡Claro que sí!- Se chocan los puños.

Ian- ¿De qué hablan?

Emma- Esa zorra que se acaba de ir es la ex de David. Y lo que hicimos es… una actuación que la mantendrá lejos de nuestros planes por un tiempo.

Thomas- “Divide y vencerás”, si claro.

Ian- No entiendo mucho pero bien por ustedes.

Emma- Gracias.

Ian- Me voy.

Sid- ¿No te vas a quedar un rato?

Ian- No jodas. Quiero dormir. Nos vemos luego.- Se va del lugar.

Thomas- ¿Me parece a mí o Ian cada vez se parece más a Willenton en comportamiento?

William- ¿El poder del casamiento?

Horas más tarde Ian llega a su departamento y nota que Hannah no está. Deja el bolso en la cama de su cuarto y va a la cocina para servirse un vaso de agua mientras prende un cigarrillo. De repente escucha el ruido de una moto y mira hacia afuera desde la ventana de la cocina. La moto se detiene en la entrada del edificio y, en ese momento, todas las dudas de Ian se comprobaron. Hannah se bajó de la moto de Santiago y lo besa apasionadamente mientras Ian observaba todo aguantándose las ganas de matarlos y de llorar al mismo tiempo. El muchacho se aleja de la ventana porque claramente no podía seguir viendo esa escena, no podía ver lo que él había hecho muchas veces en el pasado.

Apaga el cigarrillo y se sienta en el sillón mientras espera que su futura esposa entre al departamento.

Hannah entra en el departamento y mira que Ian había llegado. Cierra la puerta y actúa normalmente pensando que, tal vez, él no la vio. Cuando lo intenta besar Ian se comporta totalmente frío y se levanta del sillón.

Hannah- ¿Pasa algo?

(Aclaración: Ian empieza a cantar “I’m Not The Only One” de Sam Smith).

Hannah- Ian…

Ian, aguantándose las lágrimas- Los vi.-La mira directamente a los ojos- Te vi… Hannah.- Ahora las lágrimas eran imposibles de aguantar y salían como ríos.- ¿Desde hace…?- Cerró los ojos, no podía ni siquiera aguantar la pregunta- ¿Desde hace cuanto te acuestas con él?

De repente Hannah se pone a llorar. Él de seguro sabía la respuesta, Ian sabía todo. Lo que había hecho era una estupidez, una tontería que vio como un juego porque creía que él la engañaba… pero él nunca la engañó. ¿Cómo podría engañarla si la ama tanto que le pidió matrimonio? Sintió vergüenza por sus actos, odio hacía ella misma por haberlo engañado y mentido, miedo a su reacción cuando le dijera la respuesta…

Hannah- Dos meses.- Dijo tímidamente. Ian sabía contar y contaba rápido. Lo engañó desde que se mudaron.

Ian- Entiendo- Se levanta del sillón y se marcha del lugar dejando a Hannah sola y confundida. Ese tipo de reacción no era propio de él.

Hannah se tapa la cara con las manos y se pone a llorar desconsoladamente.

(Aclaración: En ese momento Hannah se pone a cantar “Porcelain” de Moby mientras Ian caminaba por la ciudad sin rumbo fijo).

A la noche, la casa/ campamento estaba totalmente silenciosa porque todos estaban despiertos menos Emma, que se había levantado porque le era imposible dormir por los ronquidos sonoros de Thomas. Ella se encontraba en la cocina pensando en lo que había sucedido esa tarde cuando se cruzó con Ian por casualidad.

Esa tarde

Emma- ¿Qué te sucede? ¿Por qué estas llorando?

Ian- No es nada, Emma. No es…- Se pone a llorar.

Emma- Si te pasa algo. Vamos, puedes contármelo.- Ian la mira.- Prometo no decírselo a nadie, lo juro.

Ian vacila un momento pero al final decide contarle lo que le pasaba a Emma, más que nada porque necesitaba descargarse con alguien y Amanda y Sid no se encontraban ahí.

Ian- Hannah…

Emma- ¿Qué pasa con ella?

Ian- Me estuvo engañando…- Emma se queda atónita. Claramente eso no se lo esperaba.

Emma- ¿Estas…?

Ian- ¡Sí! ¡Estoy seguro! ¡¿O acaso quieres que te describa como los vi besándose?!

Emma- Perdón.- Lo abraza y nota que Ian realmente estaba mal.

Ian- Sé que no debería quejarme… yo he engañado muchas veces, pero… supongo que es el karma por todas las cosas malas que hice.

Emma- No sé qué decirte, Ian.

Ian- Sólo que…- Se quita las lágrimas.- La amo… y no quiero a nadie más que a ella.- Emma se queda en silencio, escuchando. Nunca Ian había dicho abiertamente sus sentimientos a alguien.- Cuando estaba en Londres y en Glasgow decía con felicidad que me iba  casar, que era para toda la vida. Pensaba en tener una familia con ella… y ahora me siento un imbécil  por pensar eso. Yo no pienso así, siempre criticaba a ese tipo de personas, pero era feliz. Y ahora… ahora no puedo dejar de pensar en ella con ese tipo de la moto… y me siento un idiota por enamorarme… por quererla. Pero me es imposible no quererla…

Emma- Ya, tranquilo.- Le dice cuando ve que se pone a llorar devuelta.- Hay algo que necesitas preguntarte en esta situación…

Ian- ¿Qué?

Emma- ¿La perdonarías? ¿Perdonarías el daño que te hizo aunque para ti sea imperdonable?- Ian se queda pensativo, mirándola.

De vuelta en la cocina, Emma suspira. Realmente no sabía que iba a pasar con esos dos pero se sentía triste por Ian, realmente se había enamorado el eterno “no salgo con nadie y al mismo tiempo salgo con todas a la vez”, como decía Sid sobre su amigo. Cuando iba a tomar el vaso que se había servido con agua escucha un ruido a cuerdas de guitarra, como si alguien estuviese afinando una guitarra específicamente.

Sale de la cocina y nota que alguien estaba a espaldas de ella tocando “Wonderwall” de Oasis, pero ella no logra identificar quién porque estaba de espaldas y  el lugar era muy oscuro.

Cuando termina de cantar, William deja la guitarra en el piso y se da la vuelta. Le sonríe a Emma y vuelve a su cuarto. El mensaje que le quería dar ya fue escuchado.

Capítulo 4. Fin.